Prometí subir las fotos y contar sobre mi último viaje, pero por cuestiones de pere... digo... digo... por cuestiones incuestionablemente intrínsecas del destino, no he podido hacerlo.
Por mientras, voy a compartir un video con ustedes. Es una dramatización del Facebook en la vida real. Es algo escalofriante pensar que esto suceda en el mundo real.
Y... yo, pues... sigo sin tener facebook.
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